Un viernes nublado resulta excelente para despejar nuestra ajetreada mente. Aprovecha este nublado día para reposar todo lo que tu mente y alma necesitan. No te fijes en las nubes que han nublado el cielo, céntrate en el bonito arcoíris que podrás apreciar luego. Sé optimista. Un día nublado + un café caliente + tu compañía cálida y elocuente es igual a la perfección.





