Esta es una introducción a un poema sobre mirar el mar.

Esta es una introducción a un poema sobre mirar el mar. El ponente reflexiona sobre la belleza de la naturaleza, cómo lo calma y lo refresca en estos tiempos. Al ver las olas romper en la costa y reflejar el cielo azul, me encontré sintiéndome en paz. La belleza del mar siempre logra abrumarme, y lo fue especialmente esta mañana. Ha pasado un tiempo desde que vine aquí, y la costa ha cambiado casi por completo. Sin embargo, fue bueno estar allí de nuevo, rodeado de las vistas y sonidos familiares del mar. Cuando me senté, no pude evitar sentirme como en casa. Hay algo en el océano que parece hacer que todo parezca tópico, como si estuviera viendo un episodio de un programa que he visto miles de veces. Saboreé el sonido de las olas y la brisa que sopla a través de mí, y la forma en que el sol se refleja en el agua. Hay algo en mirar el mar desde lejos que me hace sentir libre. Puedo ser yo mismo y no tener que preocuparme por nada más. No es raro que el clima sea perfecto mientras estoy mirando. Pero hay algo en particular que la hace muy especial. Las olas son suaves y el cielo es azul y brillante. Hay una sensación de paz y serenidad que acompaña al buen tiempo, y me hace sentir sola y aislada. Aunque estoy rodeado de una hermosa vista, sigue siendo únicamente un recuerdo. El océano es un lugar especial que tiene un efecto especial en mí. Me hace sentir libre y en paz, y siempre es una buena experiencia. El clima también es perfecto hoy, por lo que hace que la experiencia sea aún más especial.