Una niebla flota, los pesados cargados
Fantasma blanco y frío del mar.
Una a una las colinas se van apagando,
El camino y el pimentero.
Veo la niebla flotando en la ventana
Con el mundo entero vuelto ciego,
Todo, hasta mi anhelo, se adormece,
Incluso los pensamientos en mi mente.
Puse mi cabeza sobre mis manos delante de mí,
No queda nada por hacer o decir,
No hay nada que esperar, estoy cansado
Y pesado como los muertos.
por Sara Teasdale